En una entrevista para Canal Sur, Mónica compartió su experiencia como diseñadora de moda en este gran evento.
El mundo de la moda es mucho más que alfombras rojas y pasarelas. Detrás de cada look impecable hay manos expertas que cuidan hasta el último detalle. Este año, en los Premios Goya, la gran cita del cine español, una diseñadora granadina jugó un papel clave entre bastidores: Mónica, diseñadora de MONAE que estuvo preparada para cualquier imprevisto en los vestidos y trajes de los premiados y presentadores.
Su labor consistió en estar entre bambalinas, aguja en mano, lista para cualquier ajuste de última hora. Un botón suelto, una cremallera rebelde o un dobladillo traicionero podían arruinar un momento único, pero su destreza y rapidez aseguraron que cada prenda luciera perfecta.
El trabajo de una modista en eventos como los Goya es fundamental. La moda y el cine van de la mano, y el éxito de una gala depende también de esos pequeños detalles que, aunque invisibles para el público, marcan la diferencia.
Gracias a su talento y profesionalidad, Mónica demostró que la costura sigue siendo un arte imprescindible en el mundo del espectáculo.